domingo, 23 de enero de 2011

La garra de Arquímedes

La garra de Arquímedes, fue un arma de asedio diseñada por Arquímedes para defender la ciudad de Siracusa de los ataques por el mar. Era algo así como un tipo de grúa equipada con gancho de metal que era capaz de elevar a las naves atacantes por encima del agua, para luego dejarlas caer, causando así el hundimiendo del barco.
Estas máquinas se hicieron famosas durante la Segunda Guerra Púnica, cuando la República romana asedió la ciudad de Siracusa entre los años 213 y 211 a. C. Cuando la flota romana se acercaba a la ciudad aprovechando la oscuridad de la noche, las máquinas se desblegaban y provocaban el hundimiento de muchos barcos y la confusión en el ataque Polibio narra que la intervención de Arquímedes en el ataque romano a Siracusa fue decisivo, hasta el punto de que desbarató la esperanza romana de tomar la ciudad por asalto, teniendo que modificar su estrategia y pasar al asedio de larga duración, situación que duró ocho meses, hasta la caída definitiva de la ciudad.
Los romanos acercaban todo lo que podían los barcos al muro para enganchar sus escaleras a las murallas y poder acceder con sus tropas a las almenas. Entonces entraba en acción la garra, que consistía en un brazo parecido al de una grúa del cual pendía un enorme gancho de metal. Cuando se dejaba caer la garra sobre un barco enemigo el brazo se balanceaba en sentido ascendente, levantaba la proa del barco fuera del agua y después mediante un sistema de polea y cadenas se dejaba caer súbitamente el barco que se hundía.


  

Esto es un esquema aproximado de cómo sería la garra de arquímedes.